Tenemos aquí ya en una gira ultra concentrada a una de las mejores bandas de rock’n’roll primitivo de los USA. Se trata de los veteranos Subsonics encabezados por Clay Redd y Buffi Agüero y se van a marcar 10 conciertos en tan solo 11 días. ¡Sin tregua! Tienes más información en ww.folcrecords.com, pero ya te adelantamos que pasarán por dos lugares en Euskadi. El 13 de septiembre estarán en el Nébula de Iruña y el 15 en el Dabadaba donostiarra.
Traerán bajo el brazo su calentito octavo disco (píllatelo en vinilo, mejor) “Flesh Colored Paint” (Slovelnly Recordings / Promola). Se han tomado las cosas con calma y siguen destilando frescura y espontaneidad, dando la sensación de estar grabado, su garage-punk-rock, prácticamente tocando en directo. Su anterior disco fue el también destacado y potente «In The Black Spot», y han pasado ya seis largos años. Al igual que éste, en vinilo y en compacto en una edición muy cuidada en cuádruple digipack en el estupendo sello de garage, punk y rock’n’roll de Nevada Slovenly Recordings. De hecho hay hasta 100 copias en vinilo amarillo en edición limitadísima.
Seguro que no faltan en sus actuaciones el impecable arranque con el tema titular. Un órgano puro garage y una guitarra psicodélica y explosiva. Tampoco quiero dejar de citar las fuentes culturales que dicen desde su sello han inspirado este nuevo trabajo. Nos hablan de Chuck Berry, Albert Camus, AM Radio Rock, Bo Diddley, Golden Age TV, el surrealismo, Mad Magazine, el kung-fu, Melville, Little Richard, la filosofía negacionista, David Johansen, La Biblia, Dee Dee Ramone, Lee Van Cleef, Dad, Carole King, Bugs Bunny y el poema «Casablanca». ¿A qué mola? Gran melodía a lo Carole King, de hecho, en ‘Why should anybody care at all’ con preciosa melodía y estribillo pop. También suena pop y con pegadizo estribillo ‘Johnny Left-Hand’ con los acertados coros de Buffi y los punteos de Clay. Los Subsonics enamoraron a los Black Lips o a los Heavy Trash de Jon Spencer y por eso Matt Verta-Rey, los ha vuelto a producir. Así remarcan las crudas guitarras de ‘Begging Hands’. Despiden la cara A con una de esas baladas deudoras de Lou Reed. Se titula ‘Die a Little’ y es realmente mortal.
La cara B la abre la desenfadada ‘In the Black Spot’. No faltarán en vivo ‘I Believe I Don’t Believe’ con su gran estribillo, buenas guitarras y el destacado órgano. También tenemos en algún tema el vibráfono y piano de Rocio Verta-Ray, quien se encarga de la producción junto a Matt. El final es pura maravilla. El lento y tierno ‘Cold Cold Winter’, de nuevo con aliento Velvet Underground y final por todo lo alto con ‘Permanent Gnaw’ y locura guitarrera que se desbordará más en directo. ¡A por ellos!
