¡Atención a este dúo de veteranos lunáticos! La nueva propuesta de Oso Polita se llama First Girl On The Moon y la forman dos reputados veteranos como son Juancar Parlange y Eneko Cepeda que no necesitan presentación para cualquiera que haya seguido mínimamente la escena vasca de las 3 últimas décadas. Pero sí que necesita importante y amplia presentación la maravilla que nos entregan en su flamante debut “Scars” (Oso Polita).
Comienza con este disco y este grupo Oso Polita otro contraataque como el que nos ofrecieron el pasado otoño con las ediciones a la vez de Garbayo, Uniforms, Venturi y Gimnástica. Te recomiendo que te pases por www.osopolita.com si aún quieres conseguir tu copia en vinilo o si quieres enterarte de todo lo que planean para antes de finalizar el año.
Pero ahora es el momento de viajar al futuro, a la luna, al espacio y al infinito con First Girl On The Moon y su guapo lema. “Buy The Ticket, Take The Ride” que aparece en el estribillo de la magnética ‘Tiger Blood’ con sus indisimulados ecos a los Suicide de Alan Vega, sobre todo, y Martin Rev. Ellos se definen con lógica como electro post-punk y en su sonido tiene cabida el sonido de Suicide, pero también otras bandas clásicas del kraut-rock como Can o Neu! A estos hay que sumar a sus paisanos de Kraftwerk junto a los que tocarán el 1 de noviembre en el ya inminente BIME Live que promete sorpresas gratas. (www.bime.net).
Ellos mismos hablan también de influencias dispares que van de Howlin’ Wolf a Unidad Malevich pasando por Air o Moon Duo. Yo también añadiría nombres como The Limiñanas, Atom Rhumba, Akauzazte, Joy Division o Nine Inch Nails. Eso sin olvidar ilustres como Jim Thompson, Dashiell Hammett o el gran Fritz Lang (“Metropolis”, “La Mujer del Cuadro”). El estupendo disco ha sido producido por Martín Guevara (Capsula) en sus estudios Silver Recordings que ha quedado también encantado con el viaje sideral.
Un viaje que comienza con los ambientes oscuros y psicodélicos de ‘RNR’ con excelente órgano y multitud de teclados. Teclados que tienen protagonismo absoluto y que resuenan realmente magnéticos en bombas como la citada ‘Tiger Blood’. Tenemos más oscuridad y belleza en un ‘Now I Miss What I Never Had’ que cruza a los Joy Division con Nine Inch Nails. Resuenan bailables pero inquietantes en una pegadiza ‘Is It Friday Yet?’ que juega con sonidos de Alan Vega y de los primeros Kraftwerk. Tiene mucho peligro como indican títulos como ‘Scars’ o ‘Danger’. Acaban dejándonos con ganas de pinchar de nuevo este adictivo disco con una ‘Last Call’ de contagioso ritmo marcial y Suicide, que nadie debiera ignorar. ¡A ver cómo consiguen trasladar esto al directo porque puede ser algo espectacular!