Este año, por desgracia, la Azoka de Durango ha sido muy diferente a lo que conocíamos. Pero bueno, al menos se ha celebrado, y, dentro de lo que cabe, parece que los resultados han sido bastante satisfactorios. El mundo de la cultura ha demostrado que quiere seguir luchando y en ello está aunque haya sido el sector más desprotegido, como siempre, por parte de nuestros gobiernos. Viene todo esto para decir que sellos como Errabal Jazz o Gaztelupeko Hotsak han seguido publicando un buen montón de referencias aunque a un ritmo algo menor que el de otros años por estas fechas. ¡Ojalá las compruebes y veas por ti mismo si te pasas por www.errabaljazz.com o por www.hotsak.com!
Entre ellas queremos centrarnos en la bilbaína, pero crecida en Markina-Xemein, Haizea Martiartu. Esta saxofonista, compositora y arreglista ha debutado por todo lo alto con una preciosidad de disco, muy original, cuyo título habla por sí mismo. “Folketik Jazzera Ensemble” trae lo que indica su título. Una gran banda de jazz en la que le acompañan 9 músicos para llevar, con buenos resultados, buenos temas y artistas del folk euskaldun a terrenos cercanos al jazz y aledaños. Haizea creció escuchando esos temas tradicionales por parte de cantautores y bandas en fiestas populares y animados bailes. Al mismo tiempo estudió y se cultivó en la escuela ESMUC de Barcelona en su carrera como saxofonista. Así comprobó la invisible unión entre armonías jazz y el ritmo de zortziko. Así fue concibiendo este debut en solitario como una especie de homenaje a las músicas que mamó en su niñez.
Junto a ella 9 músicos combinando vanguardia, tradición, jazz experimental y popular y zortzikos. Reinventan juntos el ‘Aita Semeak’ o ‘Santa Ageda’. Tocan techo con el ‘Txoriak Txori’ de Mikel Laboa, con la inestimable ayuda del consagrado Gorka Benítez. Haziea ya se había curtido en multitud de prestigios festivales de jazz y había colaborado con músicos del calibre, prestigio y heterogeneidad de Fermín Muguruza, Jorge Pardo, Susana Sheiman, Nina o Andrea Motis. Junto a ellos fue mostrando todo lo que le habían enseñado el ya citado Gorka Benítez, Chabno Domínguez, Joan Chamorro u Horacio Fumero. Aquí escucharás como nunca lo habías hecho el ‘Agurra (Aurresku)’, esa más recónditas ‘Bazterrak’ o el mágico final con ‘Uda-Barri’. Porque Haizea saca auténtica magia de Laboa, Oskorri o la música tradicional para transportarla a nuevos territorios y dotarla de una nueva vida. Creo que aquí hay una buena idea bien desarrollada y con buenos resultados y metas aún por alcanzar. ¡Juventud y tradición unidos para dar un nuevo aire y futuro a músicas con muchas décadas de vida!