En Bilbao, su ciudad, en el Kafe Antzokia y dos fechas con las entradas agotadas. Así finalizó el pasado fin de semana Doctor Deseo la gira “Berriro zuekin. Maketoen iraultza. El reencuentro”. Fuera de la sala colas inmensas, dentro, ni un hueco. El público siempre responde a las citas con Francis y compañía. No puede ser de otra manera. No hay otro grupo que presuma tanto de ciudad en sus canciones y ya van unas cuantas. Treinta y cinco años de trayectoria dan para mucho.
Esta gira se iniciaba el pasado año con retraso debido a la maldita pandemia. La presentación del disco en directo coincidió con la aparición del virus. La banda tenía la necesidad de llevar “Maketoen iraultza” (Baga Biga) a los escenarios, su primer disco íntegro en euskera. Una recopilación de canciones que ya fueron incluidas en sus anteriores trabajos y una tema inédito. Tras una serie de conciertos, y antes de partir hacia México, Doctor Deseo quería celebrar el fin de gira por todo lo alto. Y claro, tenía que ser en casa.
Abrieron a noche DUOBITE, es decir, Josu Aguinaga y Andrés Letamendia. Pocos pueden presumir de un currículum tan extenso de bandas y proyectos como el que tienen esta dupla formada por ambos músicos mitad de Gorliz y mitad de Plentzia. Ahora están inmersos en DUOBITE, un dúo de guitarra y batería que ofrece un rock potente y rico en matices e influencias. El sábado, día en el que acudimos al Antzoki, sonaron realmente bien. Se acompañaron de bases programadas a la hora de repasar, entre otros, temas de su último trabajo ‘Buenos chicos’. En relación a esos sonidos pregrabados decir que lejos de acercarse a lo electrónico, el set list que ofrecieron sonó a auténtico rock. No faltó la canción que da nombre a su nuevo trabajo, “La bestia” y “La tempestad”. De sus otros discos sonaron “Contramedidas”, “Dile que tienes tú” y “Fuego”. Sorprende lo que DUOBITE consigue con una presentación tan escueta en cuanto a músicos sobre el escenario. Uno cierra los ojos y aseguraría que hay cuatro o cinco personas tocando. Quizás de ahí su nombre….duo y morder (bite). Lo dicho, su música muerde y no suelta.
Llegaba la hora de Doctor Deseo. Los ya imprescindibles dos rombos presidían el escenario y la intro volvió a ser “Je t’aime moi non plus” de Jane Birkin y Serge Gainsbourg. Una canción que sirve de preludio para lo que la banda ofrece sobre el escenario. Un compendio de deseos, pasiones, miedos, esperanzas y sueños. Buen sonido y buena iluminación para dieciocho canciones. La incorporación de Josu Aguinaga a la banda, en sustitución de Toro, ha ampliado la gama de matices de la guitarra sin que los temas pierdan su esencia y respetando el trabajo de los anteriores guitarristas de la banda.
En una primera parte del concierto sonaron algunos de los temas de ‘Maketoen iraultza’ Abrieron con “Ni naiz” cuya música y letra corresponden a Xabier Lete y continuaron con una genial versión en euskera del tema de Joy Division “Ez nauzu izango berriz”. Tampoco faltó esa proclama de deseos ardientes que es “Tracy lord” ni la lenta e intensa “Eta moxua hil atsekabez”. Cerraron este primer tramo del concierto con la canción que da nombre a este último álbum; “Maketoen iraultza”. Un tema que pone encima de la mesa ese término despectivo que se utilizó para calificar, culpar o simplemente marginar a quienes venían con la casa a cuestas desde otros lugares, no hablaban euskera, …
El concierto no sorprendió y sin embargo nos gustó. Doctor Deseo no necesita hacer virguerías sobre el escenario para hacer bailar y disfrutar a sus fans. A pesar de que más o menos sabes qué temas van a tocar los disfrutas de igual manera. Eso pasó con la ya convertida en himno “Corazón de tango”, que la gente empezó a cantar a capella, “Mi pequeña María” (el travesti más golfo del lugar…), “Busco en tus labios” que cada vez suena mejor en directo o ese homenaje a Bowie que es “Pequeños héroes” extraído de su trabajo ‘La fuerza de la fragilidad’. También se gustaron en “Olas y naufragios” y la delicada y sentida “Cuanto frío hace en Saturno”.
En cuanto a las colaboraciones que se anunciaban, las esperadas. Al menos una de ellas. Y que es Aiora Rentería (Zea Mays) es una habitual en los conciertos de la banda. Subió al escenario a interpretar “Abrazame” junto a Francis. Este es para mí su mejor tema (por encima de “Corazón de tango”). La de Rekalde lo da todo y pone los pelos de punta. La segunda colaboración vino de la mano de Iker, quien les acompaña durante la gira y se encarga de las guitarras detrás de los focos. Este cogió la guitarra para acompañar al grupo con “En tu rincón”.
En general hay que decir que las canciones de la banda, en algunos casos, han tenido arreglos que las hacen más bailables. Eso no las ha hecho irreconocibles como ocurre algunas veces con otras bandas y temas. Ejemplo de ello es “¿Quién mueve las cuerdas?” que sonó bien y el personal bailó. Para los bises dejaron auténticos hits de la banda, algunos de los cuales tienen ya años y, sin embargo, la gente los celebra de manera notable. “Ahora que estás dormida” e “Isla de cielo” (del año 1995) fueron las primeras. Y si al principio hablábamos de presumir de ciudad, un ejemplo de eso es el tema “Morirse en Bilbao”. Una oda a la noche bilbaína (mucho ha cambiado la noche en El Botxo). Para acabar, como no puede ser de otra manera “La chica del batzoki”. Una canción que ha experimentado una transformación al mezclarlo con el tema de Dick Dale & The Del Tones ,“Misirlou”. Este tema fue incluido por Tarantino en la película ‘Pulp Fiction’. Sin duda, un broche de oro.
Ahora toca esperar a un nuevo disco, a una nueva gira. Sabemos que tienen temas escritos, músicas preparadas pero en breve parten para América y luego tendrán un merecido descanso. Tras celebrar este reencuentro se lo han ganado.
