Foto: Amets Rodrigo
Tras el bombardeo de colores que había inundado el cielo del centro sólo pudo oírse un silencio al que acompañaron los atronadores aplausos del sorprendido público. No sería aquella la única sorpresa que recibirían los cientos de afortunados (algunos de ellos escucharían a The Limboos y TT Syndicate) que se reunieron a las 23.30 en la comparsa de Algara. Muchos desconocidos que como guerreros entrenados acabarían el concierto coreando el dulce estribillo de “My liver needs to survive”, se encargaron de recibir al grupo gasteiztarra Moonshine Wagon.
De la formación del principio sólo quedaban las raíces americanas, la música bluegrass y el buen rollo y aunque el guitarrista, Will (Mud Candies), se hubiese unido a la tropa poco antes del concierto, el trabajo que hicieron los tres músicos que se subieron a las tablas fue, como diría Barney Stinson, legendario.
“I better live alone” fue la primera canción que conocí de Moonshine Wagon, la que aún hoy me evoca parajes verdes y tardes al sol riendo. Con la canción sonando a todo volumen me paré a contemplar a los allí congregados y supe que también sería la primera para mi mejor amiga que para el final del concierto ya era fan del grupo.
Goiatz Dutto, Bufunfa y Will parecían los jinetes del apocalipsis vestidos de negro y armados con sus instrumentos de cuerda, incansables, voraces. Así le llegó el turno a “Happy and Stupid”, canción que define a la perfección el estilo folk de Moonshine Wagon; una mezcla de buen rollo y talento que te hace feliz. La música para mí es mágica por eso, puede hacer feliz a la gente con apenas unos acordes lanzados al aire y esa noche fuimos felices.
Para cuando le llegó el turno a “My liver needs to survive” ya ninguno de los presentes tenía duda alguna de que el concierto estaba siendo una autentica pasada. Cientos de voces desafinadas vitorearon ese pegadizo estribillo que relató sin tapujos como sería el final de la noche para muchos. Como guinda, dos versiones de las conocidísimas “Ace of spades” (Motörhead) y “Wagon Wheel” (Old crow medicine show).
La música de Moonshine Wagon es en inglés quizá como crítica al sistema educativo, para el que tienen una canción en euskera, portugués, italiano y pseudoinglés, o porque las raíces de este subgénero del country tiene raíces escocesas, inglesas e irlandesas. Sea como sea, lo que es innegable es que el público bebía de esa música con sed, pues no sólo agotaron el repertorio de la banda con sus súplicas para que el concierto no terminase nunca, sino que bebieron de las letras, las melodías y las bromas de los artistas que pusieron la guinda a una noche inolvidable.
Fuimos cientos los que nos congregamos para disfrutar en Algara. Cientos los que fuimos afortunados esa noche. Cientos los amigos de Moonshine Wagon.
¡Folk You!