No debiera existir ningún fan del mejor power-pop y del rock’n’roll que no conozca aún el nombre de Dom Mariani. Si por desgracia fuera así, aquí hay dos nuevas oportunidades para hacerlo. La primera viene en forma de tercer disco para su sorprendente y eficaz aventura con Datura 4. La segunda viene en forma de gira de la que te puedes informar en www.bloodymary.biz, y que llegará el 12 de octubre al Fenomena Festival de Hondarribia tras pasar por Valencia, Granada, Sevilla y la Siroco de Madrid.
Creo que Dom Mariani y sus múltiples aventuras se merecen algunos datos históricos. Quizás sea, junto al estupendo Paul Kelly, el nombre más destacado en el pop de las Antípodas sea el de Dom Mariani. Para demostrarlo tienes discos en Alive / Everlasting Records como el excelente recopilatorio “West Of Anywhere” de su gran banda DM3, una de las mejores de todo el power-pop que se hizo en los años 90. Extenso recopilatorio con bastantes temas de su fascinante debut, producido por Mitch Easter, “One Time Two Times Three Red Light”. Es normal acordarse de bandas como The Romantics, The Real Kids, The Nerves, The Beat (los de Paul Collins), The Plimsouls o The Knack. Todavía fue mejor lo hizo con The Stems. Varios discos de gran calidad y una excepcional obra maestra titulada “At First Sight Violets Are Blue”. Hay una reedición reciente con extras que hace más grande aún esta obra maestra del 87. Más antiguo y difícil de localizar es el doble compilatorio a su nombre titulado “Popsided Guitar” y aparecido hace más de una década que recogía temas en solitario, como DM3, The Stems, The Someloves, con The Stonefish o con The Majestic Kelp.
Pero es que a comienzos de esta década arrancó su última y más sorprendente aventura. Hasta entonces desconocíamos que era también un ferviente seguidor del hard-rock de los 70 y hasta del primer heavy metal de esa misma década. Claro que crecer escuchando a sus paisanos de AC/ DC… Datura 4 es un súper grupo en el que comenzó acompañado por el prestigioso Greg Hitchcock de You Am I y The New Christs. También otro par de compinches relacionados con The Drones y Rippled Souls. Debutaron en 2015 con “Demon Blues” con unas canciones realmente inspiradas e inspiradoras que harán las delicias de los seguidores de bandas como Black Sabbath, Blue Cheer, Grand Funk Railroad o de sus paisanos Wolfmother e incluso Airbourne. También meten algunos destellos psicodélicos a lo The Doors y fases de guitarras desatadas que pueden gustar a los seguidores de Neil Young & Crazy Horse. Al año siguiente repitió con otro disco más que recomendable e igual de efectivo como es “Hairy Mountain”.
Ahora, cuando muchos pensábamos que esta aventura había llegado a su fin, regresa con “Blessed Is The Boogie” de nuevo para el guapo sello Alive Natural Sound Records / Everlasting. Ahora le acompañan otros monstruos de la escena australiana como Stu Loasby (The Majestic Kelp) y el batería Warren “Wazza” Hall, batería original de The Drones. También Bob Patient (Fatty Lumpkin/ Dave Hole) en el organo Hammond y piano, y Joe Grech a la guitarra y voces. Suenan aún más hard-rock blues y tienen más aromas psicodélicos con ese destacado Hammond. Sus grandes directos les han dado enorme fama y así han tocado junto a ZZ Top, Little Steven and the Disciples of Soul, The Pretty Things, Endless Boogie, X o los ya mencionados You Am I. Arrancan desatados con los más de 5 potentísimos minutos de rock psicodélico con espirales de guitarras titulado ‘Black Dog Keep Running’. Siguen con el tema titular a ritmo boogie entre John Lee Hooker y Canned Heat, pero con estribillo puro Hooker. Fantástico estribillo con más guitarras psicodélicas potentes en ‘Run With Lucy’ y heavy boogie pesado casi a lo Black Sabbath o Blue Cheer en un ‘Ooh Poo Pah Doo’ con excepcional Hammond. Muchas bombas para sus conciertos.
Pero es que la segunda parte del disco es una pasada total. ‘Evil People Pt.2’ suena muy oscura y psych con los teclados como protagonistas y un ritmo otra vez ultra pesado. Luego llegan unos fantásticos punteos siendo casi todo instrumental excepto unos atractivos y repetitivos coros. ‘Not For Me’ es un estupendo lento que arranca con guitarras acústicas y órgano y que oscila entre Black Crowes y The Chemistry Set. Luego brillantes punteos eléctricos, piano y un pegadizo estribillo para redondear los 6 mejores minutos del disco. Pero aún queda más y muy bueno. ‘Cat On A Roof’ también es lenta y con acústicas, pero luego cuenta con otros fabulosos punteos eléctricos de Mariani. Acaban con la pegadiza ‘The City Of Lights’ también lenta y melódica y con más punteos eléctricos sencillamente espeluznantes. Si encadenan estos cuatro temas en directo puede llegar a ser casi una experiencia paranormal. ¡Aplastantes!