Deep Sea Monk: «Lo mismo sonamos a madera añeja en un tema que a electricidad y power absoluto en el siguiente».

Deep Sea Monk es un grupo vizcaíno que está en boca de todo el mundo; publico y medios se hacen eco del trabajo de este cuarteto. Aunque es un proyecto joven al que la pandemia pilló en pleno inicio, Adrián Barberá, Jara Yuste, Eneko Llona e Iván Gómez  han conseguido hacer que su nombre suene cada vez a más gente. Nominados en los Koska Sariak a Mejor Grupo Emergente estrenan su primer EP, «Midnight Stories«. No podíamos dejar pasar la oportunidad de conocer más de esta banda bilbaína de la que estamos seguros que se hablará mucho en los próximos meses.

Tenéis la posibilidad de presentaros ¿Cómo os definiríais como proyecto?

Deep Sea Monk es una banda de rock alternativo. Vivimos bajo el mismo techo y creamos música sin complejos, aunque siempre entorno al amplio abanico de la americana. Lo mismo sonamos a madera añeja en un tema que a electricidad y power absoluto en el siguiente. Somos fans del pop y el funk de la vieja escuela. Hacemos maratones de videoclips noventeros y dedicamos largas horas a pintar murales surrealistas en la pared de la cocina.

 En vuestros inicios todo ha ido bastante rápido. Empezáis a finales de 2019 y en unos meses ya estabais ofreciendo conciertos. Pero de repente llega el COVID 19. ¿Cómo habéis afrontado esta situación?

¡Nos moríamos de ganas de tocar miles de conciertos! ¡Somos carne de directo! No obstante, esta situación nos ha empujado a componer más y más concienzudamente. Hemos aprovechado para hacer un par de videoclips, aprender a manejar plataformas digitales, redes sociales… Incluso hemos aprendido a hacernos nuestras propias maquetas y hemos pasado mil horas en el estudio. Esto nos ha unido mucho.

¿Tenéis experiencia en otras formaciones?

Sí. Todos hemos tocado en varias bandas. A veces incluso coincidiendo en otros proyectos del pasado. Venimos de La Hora del Té, Hozten, Dual, Último Día, Mi Buenaventura, B Flat, … Incluso de varias bandas que nunca llegaron a ser.

Este año habéis estado nominados para los premios Koska a la Banda Emergente. Sin duda, un aliciente más para seguir trabajando.

Fue una sorpresa enorme descubrir que estábamos nominados. Agradecemos de corazón este reconocimiento siendo que apenas estamos despegando. Especialmente en un año maldito como este. Es un chute de motivación que nos empuja a seguir trabajando y a hacer planes de futuro.

Presentáis “Midnight Stories”, vuestro primer trabajo publicado. ¿Cómo estáis afrontando esta puesta de largo de vuestras canciones?

Estamos muy ilusionados con este lanzamiento. Está teniendo muy buena acogida. El feedback es súper positivo. Además, sois un montón de medios los que nos estáis echando una mano para sacar esto adelante y no podemos sentirnos más afortunados. Estamos seguros de que, cuando todo pase, vamos a hincharnos a tocar y podremos llevar nuestra música a muchos lugares.

Habéis apostado por Urtzi Iza para grabar, ¿por qué os decantasteis por él?

Algunos de la banda ya han trabajado con Urtzi. Es amigo y bien se conoce su filosofía de trabajar relajadamente, sin ir a contrarreloj e implicándose a tope. Un grupo necesita ese ambiente seguro y dejarse en manos de alguien que pelee porque las cosas suenen bien. Especialmente en un primer EP.

Entrar en estudio a grabar siempre es un momento importante para una banda. ¿Cómo ha sido la experiencia?

Básicamente nos hemos conocido como banda en esta primera grabación. Hemos echado muchas horas, pero muy necesarias. Lo mejor de todo es que ha sido cero estresante y las cosas han fluido. Nos hemos sorprendido unos a otros todo el tiempo y hemos sabido ver nuestros puntos fuertes. ¡Tenemos mucho potencial que explotar!

Sé que no gusta poner etiquetas, pero ¿cómo definís vuestro estilo?

Altrock – americana. Creemos que puede dar una idea aproximada de por dónde van los tiros…

¿Cuáles son vuestros referentes musicales?

Wilco es un referente muy importante. Otros grupos entorno al rock americano y neosoul como Alabama Shakes, Black Keys, Michael Kiwanuka, Kurt Vile, Courtney Barnett … Bowie es Dios. Cualquier cosa que salga de Damon Albarn es oro.

Lo que no se puede negar es que hay tintes de música de raíz americana.

¡Por supuesto! En mayor o menor medida, todos lo hemos mamado en nuestras casas de pequeños. Todo lo que hacemos nace de una guitarra acústica y un ambiente cálido.

 Participáis en el programa de emprendimiento en la industria musical digital financiado con fondos europeos e impulsado por Fundación Paideia con la colaboración de Radio 3, Monkey Week, Primavera Sound, Mad Cool y Mahou. ¿En qué consiste este proyecto?

Es una especie de beca para proyectos musicales emergentes. Consiste en recibir formación por parte de profesionales del sector en aspectos legales, distribución digital, marketing, autoproducción audiovisual, etc. Tenemos una serie de tutores que nos ayudan a elaborar un plan de proyección para la banda. Una gran ayuda para despegar, desde luego.

Hablando de industria musical. En esta situación pandémica se está denunciando desde el sector un “cierto” abandono por parte de las instituciones. ¿Cómo grupo que empieza cómo veis esta situación?

Nos da la sensación de que hay una falta de interés generalizada por reactivar la cultura frente a la crisis del COVID, especialmente la música en vivo. Estamos viendo cómo se desaprovechan espacios y recursos potenciales para programar conciertos donde las bandas locales puedan tener cabida. Además, vemos impotentes cómo mueren las pequeñas salas. No tenemos mucha fe en que se vayan a tomar medidas al respecto, pero sí en que todo pasará y volverán las aguas a su cauce.

 Aunque ahora mismo pocos planes se pueden hacer ¿cuáles son vuestros proyectos a corto o medio plazo?

Estamos peleando por hacer algunos conciertos de presentación del Midnight Stories. Hemos conseguido cerrar una fecha en otra ciudad, pero lo suyo es lograr presentarlo en casa. ¡Estamos en ello! Además, tenemos 3 canciones grabadas que iremos sacando como singles la primera mitad de 2021. Por lo demás, seguiremos componiendo y moldeando nuestro sonido en el local de ensayo.