Cada gira de El Mató A Un Policía Motorizado tiene como resultado un incremento importante del público que acude a sus conciertos. Sirva de ejemplo en la que ahora se ven inmersos. En muchas de las citas se ha colgado el cartel de no hay entradas. Cualquiera que escuche sus discos o que acuda a sus directos queda atrapado por esa atmósfera que desprenden. Ayer en el Kafe Antzoki estuvieron a punto de ofrecer uno de esos conciertos del que todo el mundo sale satisfecho. Más dosis de rock de lo habitual que solamente les hace bien. Sin embargo el sonido no fue todo lo bueno que deseábamos y eso que el Antzoki ofrece buena acústica y mejores técnicos.
El Mató acudía a su cita bilbaína en medio de una importante expectación. No se llegó a colgar el cartel de sold out pero la sala ofrecía una buena entrada. Los argentinos llegaban para presentar su último trabajo a Otra Dimensión (2019), un universo alternativo de La Síntesis O’Konor (2017). Un disco que agrupa canciones inéditas y versiones especiales de aquellas que incluyeron en su anterior grabación.
Como pudimos ver ayer los temas reflejan un ritmo más tranquilo. Las canciones resultaron, en general, más oscuras tal como ocurre en el disco. Si algo hay que destacar son los arreglos con el sintetizador y las dinámicas de batería modificadas. El sonido, como he comentado, deslució lo que podía haber sido una noche redonda. La iluminación escasa y por lo tanto complicada para el buen trabajo de los fotógrafos. Esperábamos las abstractas visuales que han ofrecido en otros bolos pero ayer no hubo. Aún así crearon el ambiente adecuado para adentrarnos en el particular cosmos del grupo.
La voz de Santi Motorizado quedó en un segundo plano y aunque el ocasiones pidió que se le subiera (y algo mejoró o te acostumbras) nos quedamos sin entender del todo las letras de algunas canciones. Por lo demás destacar que no es un frontman al uso sino que quiere pasar desapercibido. No hizo grandes movimientos en escena ni habló mucho. Lo mismo ocurre con el resto de la banda (que ayer se presentó en sexteto). Sin duda los argentinos tenían como objetivo que la música fuese la protagonista.
Un set list que recogió los temas del último trabajo. No faltaron canciones del resto de su discografía como “El Tesoro” y “El mundo extraño”. Estas fueron las más celebradas por un público entregado que no dejó de corear los temas y bailar (incluso hubo varios amagos de pogo). Sonaron también “La cobra” (convertida en un karaoke) y “Las luces” con sus oscuridad artificial.
Abrieron con la instrumental “La síntesis O´Konor” y, con ella, el público empezó a seguir el ritmo marcado por Santi, Pantro, Niño Elefante, Pantro, Chatrán y Doctora Muerte. Interpretaron “Nuevos discos”, “Excalibur” y “Chica de Oro”. “La Casa Fantasmal” y “Fuego” también estuvieron en el repertorio. “Más o menos bien” se convirtió en uno de los momentos destacables de la noche puesto que la voz del público se escuchó por encima de la del vocalista. Cerraron con “Prenderte fuego”. Faltó quizás una mirada clara hacia sus inicios con “Mi próximo movimiento” que ayer no pudimos escuchar.
Hora y media larga de concierto para 19 temas. Un concierto de El Mató a un Policía Motorizado al que el sonido impidió llegar a más. Aún así, incluso con la otra dimensión de El Mató a un Policía Motorizado, se demostró el porqué del éxito de este grupo. Esperamos a una siguiente vez.