Fotografías: Txema de la Cruz
Podemos decir que esta semana Valencia ha estado muy presente en el ambiente. Primero el miércoles en forma de disgusto futbolero con la eliminación copera del Athletic y, segundo, porque el sábado y el domingo la banda valenciana Los Zigarros actuaban por partida doble en el Kafe Antzokia. El fútbol lo dejamos a parte para que no afloren las lágrimas de un servidor pero lo de Los Zigarros … ¿qué decir? ¡Grandísimos!
Como decimos, tenían dos citas con la parroquia bilbaína en el Antzoki. La primera el sábado y la segunda ayer domingo. Ambas fechas venían de sendos aplazamientos pero eso no impidió que en las dos tardes se colgará el cartel de todo vendido. Nos tocó acudir a la cita dominical y, como nosotros, a muchos conocidos de la escena musical como Mario Malattesta, Gaizka Barga o Axier Kiriketa. Nadie quería perderse el concierto de uno de los grupos que mejor rock and roll están ofreciendo en la escena estatal. El cuarteto levantino presentaba su último trabajo, ‘¿Qué Demonios Hago Yo Aquí?’. Un disco grabado en directo en su concierto en el Circo Price de Madrid.
Acostumbramos a entrar con tiempo a los recintos para coger un buen sitio pero ayer, con la charleta, entramos algo justos y mientras Txema de la Cruz se hacía hueco en primera fila para las fotos, este que escribe subió a la parte alta del Antzoki para buscar posición. Difícil misión que cumplí como pude. El ambiente era increíble. Había muchas ganas de rock y de vivir un concierto como lo hacíamos antes. Ayer creo que así fue. Por fin.
Con algo de retraso aparecieron en escena Ovidi Tormo, Álvaro Tormo, Adrián Ribes y Nacho Tamarit. Y sin preámbulo de ningún tipo, comenzaron esa descarga de rock que tanto halagos genera: «Espinas«, «¿Qué Harás Amor?» (tema que dudábamos si sonaba más a los clásicos Burning o a Los Rodríguez) y «Apaga la Radio«. Tres disparos certeros para calentar el ambiente. «Hola Bilbao. Hace mucho que no veníamos», saludó Ovidi. Tras los aplausos señaló «no se lo digáis a los de ayer pero hoy estamos un poquito mejor». No sé que pensaría al respecto Sarah Franco que hizo doblete en la primera fila.
Fueron algo más de 100 minutos en los que sonaron 23 temazos con una banda entregada y un público que no dejó de cantar, gritar, bailar y corear. Lo único negativo en lo que coincidimos bastante gente (tanto del sábado como del domingo) es que el sonido no fue el mejor. Yo no llegaba a entender las letras salvo tres o cuatro excepciones. Esto no restó para que fuese un muy buen concierto. Las luces de cara al público estaban bien aunque para los compañeros gráficos no fueron las deseadas.
Siguieron a las anteriores interpretando «Con las Manos Rotas«. «Tocar un domingo es una maravilla» aseguraba Ovidi. Continuaron con «Voy Hacia el Mar«, «Queda muy Poco de Mi» y «No Sé lo que Me Pasa» con un destacado solo de guitarra de Alvaro. Con el riff que introduce a «Baila Conmigo» se desató la locura. Palmas, saltos … Uno de los mejores temas del concierto. Era el turno de las dos versiones que sonaron. La primera «No Obstante lo Cual» de Riff (creo que argentinos) y «Mis Amigos«. De esta última me contaron algo de lo que ahora tengo alguna duda. Este tema era de los Flying Rebollos pero, según me informaron, Los Zigarros compraron o quisieron comprarla (que el informante me perdone si no fue así). Por cierto, esta canción se le dedicaron a Polako, ex miembro de la banda portugaluja y actualmente manager de Los Zigarros.
El concierto ya iba a más, imparable. «Malas Decisiones«, «Dispárame» una canción que según Ovidi, «Álvaro escribió en el seno materno», un extendido «Cayendo por el Agujero» en el que Ovidi hizo cantar al público y la muy coreada «Odiar Me Gusta«. Tras «Resaca«, en el que destacaba un revolucionado solo de guitarra, y, sin pausa alguna, sonó «Voy a Bailar Encima de Tí» con la que el público disfrutó de lo lindo.
La siguiente fue «Con Un Solo Movimiento«, canción con un gran poderío al igual que «Hablar, Hablar, Hablar» que sonó a ¿Tequila? y que fue una de las más coreadas. Antes de retirarse nos regalaron «Desde Que Ya No Eres Mía» y «A Todo que Sí» de la que, según Txema de la Cruz, las guitarras sonaban a AC/DC. Entre medias de las dos, el altísimo Ovidi destacó que «la anterior vez llenamos un día, ahora hemos llenado dos».
Para los bises sonaron tres temas. La buenísima «Tenía que probar«, «Dentro de la Ley» y «¿Qué Demonios Hago Yo Aquí?«. Acababan por todo lo alto. Los Zigarros dejaron claro que el rock es eterno y que con esta banda está más vivo que nunca.