Usando un simil taurino, Los Jalapeños de la Frontera están en capilla. Edu Basterra, Borja García, Eider Goñi y Jon Gartxi presentarán el próximo 22 de abril en La Ribera su primer álbum.
El CD, financiado exitosamente vía crowdfunding, es la culminación a unos años de duro trabajo por parte de la banda, en los que han definido su sonido y, como los buenos caldos, han ido madurando el proyecto pausadamente hasta llegar a esta puesta de largo. Antes de esa fecha, para la que los miembros del grupo ya están ansiosos, se rodarán fuera de Bizkaia con unos cuantos conciertos.
Hablamos en RockInBilbo con Jon Gartxi, uno de los miembros de Los Jalapeños de la Frontera. Con él abordamos sus inicios, las jornadas de grabación de su debut discográfico y los planes de futuro.
-¿Qué razones os llevaron a adoptar un nombre como de el de Los Jalapeños de la Frontera?
Empezamos a hablar sobre el sonido fronterizo y ahí se afincó “el apellido”; lo de Jalapeños se le ocurrió a Baxter tras acordarse de un personaje ventrílocuo llamado “José Jalapeño”. Hicimos una votación y Borja votó a favor (resultado 3-1) pensando que el nombre era broma. Imaginaos las risas cuando se enteró de que ya no había vuelta atrás.
-¿Cómo surgió el grupo? ¿Qué os llevó a formarlo?
Roberto Herrera (dueño del antiguo Pub Dubliners) propuso a Baxter hacer un conciertillo todos los viernes en el formato “Baster Korner Show”. El caso es que Edu se puso a buscar aliados que le dieran aliento para el asunto y un día, tras la Jam Session que llevan los Pushermen en el Pub Imán (cada jueves), nos pusimos a hablar y ahí comenzó la historia. Empezamos a tocar cada viernes en el Dubliners y ya se lio la cosa.
-¿Os costó compenetraros a los cuatro miembros del grupo: Edu Basterra, Borja García, Eider Goñi y tú? ¿Os conocíais ya?
Cualquier cosa menos problemas de compenetración. En ocasiones nuestros ensayos se parecen más a un Club de la Comedia trasnochado (eso sí, a lo largo de 4-5 horazas que nos metemos de ensayos). Había dos sectores: por un lado Eider y yo ya nos conocíamos, y por el otro Borja y Baxter. Pero nos hicimos muy rápido los cuatro.
-¿Cómo definirías a cada uno de los integrantes de Los Jalapeños de la Frontera? Su aportación a la banda.
Es complejamente sencillo. Borja es el “Pollo Alfa”. En ocasiones le amordazamos para que deje de hablar de sus múltiples conquistas nocturnas; Borja es un desesperante cúmulo de humor. Eso sí, está cogiendo un ‘sonidazo’ buenísimo a base de meter horas.
Baxter es el “Jefe Indio”, aporta sus setecientos años de experiencia pero confía en el saber hacer del sector más joven (sobre todo para asuntos de marketing-producto-financiero, etc); y además encaja su humor y frikadas varias a la perfección.
Eider creo que es en realidad la jefa. Lleva la voz cantante sobre el escenario pero también entre bambalinas. Su risa es la más contagiosa que podáis escuchar. Es una especie de esponja musical que hace que todo le parezca fácil. En 5 minutos te aprende a tocar el piano, la batería, la armónica o el acordeón.
Y yo soy un poco el elemento “Farsante”, más enfocado al show. Soy un componente versátil para la música, siempre tengo en mente la estrategia del negocio. Y además soy experto en chistes malos (alguna vez roza el ingenio) y me pongo en plan oratorio muy fácilmente.
-Qué tal tener a un músico con la experiencia de Edu Basterra en la formación?
Es como si en dos años hubieras pasado de preescolar a un doctorado en física cuántica. Desde el primer día nos ha enseñado de todo, nos ha abierto puertas, nos ha facilitado un montón de fases por las que teníamos que pasar. Pese a ser nuevos, nos ha hecho un pase VIP al círculo musical, hemos tocado en mil sitios y hemos grabado en un estudio de grabación de primer nivel (Sweet Saul Music). Habrá que preguntarle a Edu “qué tal la experiencia de tener a tres músicos sin experiencia en la formación”.
-Banda de blues rock’n’roll y country pero abiertos a estilos como rockabilly, soul o ritmos ska. ¿Con cuál os identificáis más?
Con este asunto de “etiquetar” a la banda nos volvemos siempre locos. ¿”Rock Fronterizo” es un término válido? No todos tenemos las mismas raíces musicales, eso se deja notar, y nos determina al mismo tiempo. El álbum que acabamos de sacar deja esto patente. Puedes encontrar una estructura Bossa pocos temas después de un Rock&Roll sucio, y antes de un Swing. Cada uno siente más afinidad por unos estilos (incluso estando dentro del mismo proyecto).
-¿Qué pretendéis transmitir al público con vuestra propuesta?
Queremos que el público disfrute. Que quien tenga oído fino escuche y quien sea de pies inquietos los haga bailar. Y decir que el Country o el Blues no sólo se puede hacer en inglés.
-Debutasteis en febrero de 2014 en el Dubliners. ¿Recordáis cómo fue aquel debut? Supongo que muchos nervios.
En realidad dimos un mini-bolo antes en el Residence, cuando aún sólo habíamos hecho como un ensayo. Estábamos demasiado ocupados pensando en “a ver qué hacemos” como para estar nerviosos. Después vinieron los mil viernes del Dubliners donde nos curtimos. Para tres cuartas partes de la banda aquel escenario era una especie de estadio en miniatura.
-Durante este tiempo habéis perfilado vuestro sonido ¿Cómo ha sido el proceso de maduración musical de la banda?
Como diría algún personaje ilustrado: “estamos trabajando en ello”. Siempre andamos buscando el sonido a nivel técnico y de “género”. Por un lado nos gustaría poder hacer un sonido característico, por otro os digo que hemos hablado de Electroswing y de King Crimson en nuestros ensayos. Esto es como la cocina, para que te salga una buena salsa tienes que hacerla muchas veces e ir probando a añadir nuevos ingredientes. Al final, cuando mejor sabe es cuando se ha hecho con “mimo” y con buena mano. Hemos ido aportando todos música y/o opinión a la cazuela.
– Creasteis un repertorio de versiones (Johnny Cash, Allman Brothers, Etta James…), cantadas fundamentalmente en inglés ¿Qué criterios seguisteis para esa confección?
El criterio marida entre “¿te sabes la de…?” y “me gustaría tocar esta otra de…”. Juntar gustos y conocimiento. Y disfrutar tocando, cambiando, quitando, poniendo…
-Tras el proceso de definir el sonido de la banda os llegó el momento de dar el salto con la publicación de vuestro primer álbum. Para ello recurristeis al crowdfunding ¿Satisfechos con la respuesta de la gente?
Lo del crowdfunding fue espectacular. Sobrepasamos lo que pedíamos. La gente nos apoyó muchísimo y nuestra alegría fue máxima. Entendemos el crowdfunding como “pago por adelantado”. Hay demasiados trabajos guardados en cajones que no han visto la luz por circunstancias puntuales. Resulta que luego te enteras de que hay gente dispuesta a pagar por algo que tú has hecho con esfuerzo y eso es muy gratificante. Gracias a todos los mecenas, a todos los que habéis comprado el disco y a todos los que nos apoyáis en cada concierto. ¡Viva Peña Jalapeña!
-Temas en castellano con aires Rockabilly, Tex-mex, Bossa, Blues, componen vuestro debut. ¿Fue laboriosa la composición de las canciones?
En algunas canciones hemos dado mil vueltas, empezaban siendo de un estilo y terminaban en otro. Escribir letras en castellano para estos géneros intimida, pero resulta que luego era sólo un prejuicio. Estamos contentos con nuestro trabajo. Dice la leyenda que a alguno de nuestros seguidores incluso se le ha pegado algún estribillo.
-¿Cómo ha sido el proceso de grabación del álbum?
Desde que entramos en el estudio hasta que se acabó el disco pasaron 4 meses. Primero grabamos las bases (bajo y batería) con unas guitarras acústicas como guías. Después empezamos con las voces, coros, armónicas, guitarras. Y dedicamos tiempo a pequeños detalles para dar textura como panderetas, algún piano, arreglos de guitarra. Fuimos trabajando de forma intermitente, revisando el sonido de cada tema, detalles, voces y varias meteduras de pata. Baxter metió mil horas en casa buscando corregir cada detalle, y Saúl ha hecho magia. Para Borja, Eider y para mí fue la inigualable experiencia del “primer disco”, con la suerte de tener a Baxter y a Saúl Santolaria (Sweet Saul Music) para debutar en primera división.
-El próximo 22 de abril será la presentación oficial del CD de Los Jalapeños de la Frontera en la sala La Ribera ¿Lo esperáis ya con ansia?
Ansia, nervios, expectativas, ganas de disfrutar, ganas de que disfruten… Es una meta. Cada día que pasa está más cerca y sólo queda el “vamos a hacerlo como nunca”. Hemos trabajado muchísimo, tenemos ganas de Rock & Roll.
-A partir de ese instante se abre la ‘veda’ para la promoción del disco. ¿Tenéis planeado realizar gira por aquí y fuera de Bizkaia?
Claro. De hecho vamos a hacer una pequeña gira fuera de Bizkaia antes de la presentación oficial para engrasar un poco. Iremos con Kepa Calvo a la batería y tocaremos en Castro, Santander, Gasteiz y Donostia antes de llegar a La Ribera. Después volveremos a salir (estamos apuntando alguna incursión a Madrid también).
-No sé si será muy pronto, pero ¿se os ha pasado ya por la mente ir a por el segundo largo?
Aún no hemos presentado el disco y ya van llegando cosas nuevas al local de ensayo. Si algo queda claro con nuestro disco de 15 canciones es que el ritmo de composición de Los Jalapeños de la Frontera es bastante elevado. Ese segundo largo podría ser el trabajo que consiga colgarnos una “etiqueta” de sonido, o quizás sea otra gran mezcla de estilos y formas de comprender la música.
-¿Qué planes y/o proyectos tenéis este año como banda?
Que se escuche el disco, hacer algunos bolos en colaboración con otras bandas y disfrutar del trabajo que vayamos haciendo. Y chistes malos, que es lo nuestro.