La verdad es que la mallorquina de origen macedonio, Maika Makovski está, año sí, año también, (vamos cuando saca disco nuevo) en las listas de los mejores discos del año. Lo viene haciendo la televisiva desde hace más de dos décadas y lo ha logrado con varios de sus discos, como “MKMK”, “Desaparecer” o “Chinook Wind”, alguno con la producción también Bristol de John Parish (PJ Harvey). Este año ha repetido con “Bunker Rococo” y ha conseguido algunos de los puestos más destacados porque ha hecho su mejor y más personal disco hasta la fecha. Se lo ha trabajado y lo ha madurado y el duro trabajo le ha valido y cundido la pena.
Lo bueno es que también suele estar entre los mejores directos del año porque cuenta siempre con una banda de grandísimo nivel (ahí suele estar nuestra paisana Mariana, que toca batería, percusiones, teclados y pone voces, y que, además le acompañó también en su divertida aventura con The Mani-las. Por eso será importante que te muevas rápido en www.kafeantzokia.eus para que no te quedes sin tu entrada dentro dl festival por varias salas y con varios conciertos ‘Negufest‘. La cita será en el Antzokia el 17 de enero y te puedes esperar lo mejor. Entre ello, estará la posibilidad muy real de que toque casi prácticamente al completo su “Bunker Rococo”. No es un disco de los que entra a la primera pero va calando más y más hondo cada vez que lo escuchas y te vas quedando con sus múltiples y muy trabajados matices.
Conocíamos previamente el original y destacado single ‘Hunch Of The Century’ con un ritmo 5/4 nada habitual. Te va hipnotizando y para ello ayudan las buenas guitarras de su habitual acompañante, Xarim Aresté. ¡Mucha atención también al artístico videoclip, algo que también cuidan como nunca! Temas que no se quedan en la superficie, bastante largos y también con mucha variación dentro de los mismos.
Comienza con los aires a rock progresivo de una musculosa ‘Muscle Cars’. Aquí contamos ya con la presencia de un total de 12 músicos y con unos arreglos y músicos de cuerda realmente atractivos. En la prestigiosa producción tenemos a un Ali Chant que ha trabajado con Perfume Genius, Yard Act o Aldous Harding, entre bastantes más. Por si fuera poco mete un montón de diferentes instrumentos, programaciones y sintetizadores. Dicha riqueza instrumental y experimentación nos lleva a pensar en artistas como Kate Bush, Scott Walker, King Crimson o el jazz oscuro y galáctico del “Blackstar” de David Bowie. Muchos teclados por parte de Maika y de Ali en una ‘Just A Boy’ de nuevo con algún aire progresivo, pero también con algún toque funk. Nos da algo de tregua con el hermoso medio tiempo, que comienza casi como una balada titulado ‘My Head Is A Vampire’. Con sus guitarras y teclados que van creciendo mezclándose con otra lograda melodía. Algo que también sucede en una ‘Exotic Ingredients’ excelentemente cantada por Maika y con los buenos coros de Ali. Bobbi Relac mete unas guitarras realmente apasionantes. Pop hermoso que puede recordarnos a los mejores Big Thief. Como Maika no ha tenido nunca limitaciones musicales no le incomoda acercarse a sonidos de música clásica o experimental con una preciosidad como ‘The Brotherhood’ que, con sus cuerdas y sus vientos, parece algo deudora de los aromas del mítica “Paris 1919” de John Cale.
Sorprende la primera colaboración estelar con el saxo y la flauta de un Donny McCaslin que por algo ha tocado con el citado Bowie. Lo hace en ‘Syrinx’ con algún toque que le puede acercar a Peter Gabriel o a Scott Walker a partir de “Tilt”, pero también a la citada Kate Bush. Vuelven a destacar los arreglos de cuerda fastuosos y ricos del Quartet Brossa en ‘A.I.’, otro tema pausado con brillantes guitarras y con una Maika que canta excepcionalmente y no cansa aunque llega casi a los 5 minutos. La otra colaboración estelar es la de su amigo, que repite, Howe Gelb (Giant Sand) con su especial voz y su precioso piano en ‘B Series’. En dicho tema vuelve a brillar con su muy personal guitarra Bobbi Relac. Tras un apacible y acústico arranque, cuando canta Gelb y con esos arreglos me recuerdan a los tiempos de Giant Sand en los que todavía estaban en la banda los miembros de Calexico. Por ejemplo en ese precioso “Chore Of Enchantment”. Precioso intimismo en ‘The Spanish Inquisition’ con destacadas guitarras y cuidados sintetizadores. Más logradas cuerdas y cuidados arreglos en la final ‘The Door’ también con sus toques progresivos. Presentación cuidadísima en vinilo y en compacto con un guapo libreto con póster y las también especiales letras en las que merece la pena perderse también dentro de ellas. ¡Con estos temas, algunos de sus clásicos y con lo que suelen transformar sus temas en directo puede que estemos ante una de las giras del año!
