¡Fue una gratísima sorpresa el descubrimiento del cuarteto francés en la sala Santana 27! Actuaron como teloneros de los suecos The Baboon Show que fueron el torbellino habitual de rock’n’roll. La verdad es que el sonido de ambas bandas poco tienen en común, pero estuvo bien como contraste y, como ya hemos dicho, como nuevo descubrimiento. Tal es así que nos hicimos con su último disco. Un «Staring At The Sun» muy jugoso y que tiene mucho que ver con el sonido post-punk que dominó su actuación.
Los franceses Not Scientists entroncan en una onda post-punk que nace con Joy Division o Echo & The Bunnymen y sigue con Interpol, Editors y A Place Tl Bury Strangers, pero, sobre todo, su grupo de cabecera, algo que me confesó su simpático cantante y guitarrista, tras el buen concierto, son The Cure. Muchos ambientes similares y hasta un tono de voz cercano en más de una ocasión al del propio Robert Smith. ¿Es eso malo? Para mí no, desde luego. Y tampoco lo fue para muchos de los que habían ido a ver a The Baboon Show y que quedaron gratamente sorprendidos por el sonido de los Not Scientists. Por cierto, traían varios de sus discos en vinilo de color y una buena cantidad de camisetas todas ellas, al igual que los discos, con atractivos diseños visuales.
Pero vayamos con el nuevo disco que tiene tela que cortar al igual que la tuvo su potente actuación. El disco arranca con una ‘Push’ que creo fue también apertura del concierto. Bajo gomoso muy presente, guitarras de sonidos agudos que ge arañan y esa voz muy Robert Smith que coloca a los Not Scientists en muy buen lugar en esa estela marcada por The Cure, Interpol o Editors. Siguen las guitarras cristalinas (también con ecos a The Chameleons) y el ritmo contagioso de ‘Like Gods We Feast’. Buen sonido y destacar la grabación y producción del disco por parte de nuestro Santi García en sus Ultramarinos Costa Brava Estudios. Y la masterización de Víctor García, claro. Suena más rápidos y cercanos al punk en ‘Heart Attack’ y cierran la cara A a toda velocidad y más ecos a Chameleons o Interpol en ‘Rattlesnake’.
La cara B arranca más melódica con ‘Standing At The Edge’ en la que vuelven a destacar ese poderoso bajo y los atractivos coros. Coros que en directo eran a tres voces (los 2 guitarras y el bajo) y que acrecentaban el atractivo de bastantes temas en los momentos más explosivos. Llama mucho la atención que en un grupo tan dentro de la etiqueta del post-punk y con tantos efluvios a los de Robert Smith, elijan como única versión de su disco la de los legendarios del primer punk, U.K. Subs, ‘%8 x 5’. Y es que se les vieron las costuras más punks, sobre todo en directo, en más de una ocasión. Una gozada son las guitarras circulares cruzándose en el tema titular. Eso es justo antes del impactante final con ‘Listen Up’ y sus riffs de guitarras realmente afilados. Un tema pegadizo y más que posible single y gran elección para cerrar un disco muy atractivo de una banda a la que seguiremos más de cerca a partir de ahora.