¡Grata sorpresa el descubrimiento de esta buena banda cántabra de rock americano que nos brindó un buen concierto el día 9 de marzo en el Coppola de Bilbao! Uno de los locales, por cierto, que más ayuda a la escena local en forma de conciertos con entrada gratuita y con bandas que componen su propio material. Se juntaron en la época de la pandemia, pero ellos son bastante veteranos y han tocado anteriormente en otras formaciones poco conocidas. Querían hacer las cosas bien y con calma y se han madurado unas composiciones con mucho recorrido.
Por eso han acudido a los Guitar Town Estudios de Hendrik Röver que, además de encargarse de la buena producción, ha añadido percusiones en varios temas y banjo y dobro en las dos versiones de uno de los temas con más acercamiento al country-rock de Eagles, The Flying Burrito Brothers (Gram Parsons) o Poco como es ‘Poppy Fields’, que goza de otra versión final con las voces algo cambiadas. Suponemos que al quedar las dos tan chulas no supieron por cual decantarse. El disco lo puedes conseguir en su Instagram @wearetheivers y de paso intentar hacerte con él.
El disco se abre con la preciosa y melancólica ‘Rain’ con aromas al Tom Petty de “Wildflowers”, pero también con un cálido estribillo que recuerda al gran clásico de Steve Harley & Cockney Rebel, ‘Make Me Smile’, aunque suponemos dicha conexión será casual. Ellos, con su buen sonido, beben más de músicos como Neil Young, The Jayhawks, Bob Seger (sobre todo en su faceta baladística o en sus delicados medios tiempos), Wilco, The Band o John Mellencamp. El disco se grabó con formación de quinteto y la buena aportación de los teclados y voces de una Elsa Calleja que no ha podido continuar con ellos, pero que demostraron haber sabido suplir su ausencia en su buen directo.
Tocaron el disco al completo con temas destacados como ‘Something Went Out Wrong’ o una ‘Birthday Song’ que dedicaron a alguien del público que cumplía años. Ambos, incluso ‘Really Gone’, son de esos citados medios tiempos, o casi baladas, en los que nos recuerdan mucho y para bien al Bob Seger de joyas como ‘Against The Wind’ que en disco ganan aún más detalles con el buen piano y órgano de Elsa. Sería buena idea que se atrevieran con dicha preciosidad también para poder meter en sus buenos conciertos. Fueron también momentos cumbre de disco y actuación la campestre y trotona ‘Former Country Boy’ (le falta una armónica por ahí) o la estupenda y pausada ‘Stumbling Down’, con algunos de los mejores punteos del disco, que dejaron para el rush final y también cierra el disco, si exceptuamos la versión alternativa de la ya citada ‘Poppy Fields’, todavía con aires más country e incluso bluegrass. Más enérgica y rockera suena una potente ‘Living On The Edge Of Your Eyes’, con su poderoso estribillo y sus ecos al “Being There” de Wilco, y destacado piano también. Emoción a raudales en la sentida balada ‘For A While’ que nos lleva a los tiempos de cuando John Mellencamp era todavía John Cougar. Los buenos coros de Elsa en el disco han sido bastante bien sustituidos por los del bajista Gonzalo. La gran mayoría de las canciones están compuestos por su buen cantante, con su voz con garra, Oscar Duque, aunque en algunas le ayuda el otro buen guitarrista Casta. Por cierto, algunos de los aromas más Neil Young surgen cuando ambos enfrentan sus guitarras como sucede en la estupenda ‘Northern Skies’ que sirvió para cerrar su concierto de Bilbao. Como indicativo de su sonido y sus gustos te diremos que en directo nos sorprendieron con una potente versión del ‘Honey Bee’ de Tom Petty o con ‘Indianapolis’ de The Bottle Rockets. Seguirán acudiendo a nuestros escenarios y seguirán deleitando a los muchos seguidores del mejor y más atemporal rock americano de raíces.
¡Bienvenidos!